24 de diciembre de 2010

Historia de un Pabellón

Esta historia comienza hace ya varios años, cuando Pedro José Molina (el anterior Director del Instituto) y Juan Ballarín (Presidente del APA) se lamentaban de la escasa utilidad que se da a las pistas deportivas de los Centros Educativos.


En los primeros momentos, por casualidades de la vida, contactaron con Raúl Morales (Presidente del Club de baloncesto “Lupus”) que les comentaba la problemática que tienen todos los clubs de este barrio derivada de la falta de instalaciones para entrenamientos y partidos. Él se quejaba de no poder acoger a más deportistas precisamente por esta escasez de pistas deportivas.

Todo lo anterior venía a aumentar nuestra preocupación por la escasa cantidad de jóvenes y adolescentes que realizaban, de forma estable, una actividad deportiva, la cual veíamos como mejor y más completa forma de ocio y alternativa a otras actividades de carácter nada saludable.


Tras estas reflexiones, había poco más que hablar, sólo quedaba compartir sus ideas y ponernos a trabajar. El Consejo escolar del Centro y toda la Junta de la Asociación de Padres acogimos esta propuesta con ilusión, aunque tal vez con algo de escepticismo, había que invertir un dinero entre todos, que por entonces no teníamos.
Ya estaba claro: “teníamos que potenciar el deporte entre nuestros jóvenes y para ello debíamos ofrecer unas instalaciones dignas a nuestros hijos y los de nuestros vecinos

Comenzamos a acondicionar las pistas exteriores, el Instituto instaló nuevos focos de luz y cambió las antiguas porterías de fútbol-balonmano, la Asociación de Padres compramos (de segunda mano) unas estupendas canastas de baloncesto y el LUPUS hizo la inversión mayor arreglando el suelo, repintando las pistas, modificando vallas y todo lo que fue siendo necesario para realizar de forma correcta varios tipos de deporte.

Modificación que se realizó en la valla

Partido de baloncesto.  Se ven la nuevas canastas y porterías.

En aquél momento se sumó a este proyecto el Club de Balonmano “La Jota” que a su vez compró una malla de separación de pistas y aumentó la iluminación de alguna pista.

Malla de separación de pistas.

Algunos sabíamos que no podíamos acabar aquí, que depender de la climatología para realizar las clases de educación física o para realizar un entrenamiento extraescolar no era la forma idónea para “enganchar” a más adolescentes en este mundo del deporte activo.

Nuestra primera idea era hacer un tejado e incluso un toldo que protegiera de la lluvia una pista deportiva, pero este “apaño” era caro y resolvía poco.
Con la ayuda de algunos buenos amigos trasladamos nuestra inquietud a la Sra. Consejera de Educación y la Sra. Concejala de nuestro Distrito, la idea gustó mucho y ambas ofrecieron su colaboración para nuestro proyecto de construir un pequeño pabellón deportivo dentro de los terrenos del Instituto y abierto al uso organizado de algunos clubes deportivos de nuestro barrio.


Cerca de 2 años de gestiones, presupuestos, proyectos, papeles y licencias han llevado a lo que hoy es una realidad y las obras han comenzado. Con las normales dificultades que toda gran obra lleva consigo, por fin comenzábamos la excavación y cimentación de lo que pronto será el Pabellón “Pilar Lorengar”
Juan Ballarín

No hay comentarios:

Publicar un comentario